En audiencia de terminación anticipada, el Poder Judicial de Cajamarca, condenó a Edson Romario Castillo Prado a más de un año de pena privativa de la libertad efectiva por robar las autopartes del vehículo de Brandon Pajuelo Merino, el pasado 18 de diciembre en dicha ciudad.
La jueza del Segundo Juzgado de Investigación Preparatoria de Cajamarca, en adición a sus funciones como Juzgado Penal de Flagrancia, encontró culpable a los imputados Edson Romario Castillo Prado y Diomedes Faichín Malquipoma, por la comisión del delito de hurto agravado en grado de tentativa, en agravio de Brandon Pajuelo Merino.

Tras evaluar los hechos y verificar la legalidad de la detención en flagrancia, así como la aceptación de cargos por parte de ambos procesados en audiencia de terminación anticipada, la magistrada impuso a Edson Romario Castillo Prado una pena de un año, nueve meses y veinte días de pena privativa de la libertad efectiva, ordenando su inmediato traslado a un establecimiento penitenciario.
Mientras que Diomedes Faichín Malquipoma se le impuso un año, dos meses y veinticinco días de pena privativa de la libertad suspendida, sujeta al cumplimiento de reglas de conducta.
La decisión judicial se sustentó en que el delito fue cometido bajo un supuesto de flagrancia delictiva, conforme al artículo 259 del Código Procesal Penal, además de acreditarse la evidencia delictiva, el reconocimiento inmediato por parte del agraviado y los daños ocasionados al vehículo afectado.

En el caso de Castillo Prado, la jueza consideró determinante la existencia de antecedentes penales previos, lo que imposibilitó la aplicación de una pena suspendida.
Los hechos ocurrieron la madrugada del 18 de diciembre de 2025, cuando ambos sentenciados intentaron sustraer autopartes del vehículo de placa M6J-371, estacionado en la urbanización Campo Real, en la ciudad de Cajamarca.
Para ello, Edson Romario Castillo Prado rompió la luna posterior del vehículo, mientras que Diomedes Faichín Malquipoma cumplía la función de “campana”. Al ser descubiertos por el propietario, emprendieron la huida, siendo capturados minutos después por personal policial.
De esta manera, la unidad piloto de flagrancia viene alcanzando su finalidad, dictando sentencias céleres y oportunas.



