La caída del muro de contención afectó el área de vestuarios y expuso las precarias condiciones en las que trabajan 40 agentes de la comisaría San Pedro
Un muro de contención se desplomó sobre las instalaciones de la comisaría San Pedro en El Agustino, destruyendo el área de vestuarios y exponiendo la crítica situación de infraestructura en la que operan los efectivos policiales del distrito. El colapso afectó directamente los casilleros de los 40 agentes que laboran en la dependencia, revelando no solo un problema puntual sino el estado general de abandono que sufre la comisaría.
Infraestructura policial al límite
El muro de ladrillos cayó sobre la calamina que cubría el área de vestuarios, dejando a los agentes sin un espacio básico para cambiarse y guardar sus pertenencias. RPP llegó al lugar y verificó que la comisaría presenta múltiples fallas estructurales que van más allá del muro caído. Esta situación plantea interrogantes sobre las condiciones laborales de los policías que se supone deben garantizar la seguridad del distrito.
Las autoridades municipales enviaron un volquete para retirar los escombros y personal para supervisar los trabajos. Sin embargo, esta respuesta reactiva no aborda el problema de fondo: la comisaría opera en condiciones precarias que ponen en riesgo tanto a los agentes como a los ciudadanos que acuden a ella.
El reclamo vecinal que nadie escucha
Los vecinos de la zona denunciaron que este colapso era previsible y que las autoridades brillan por su ausencia. «Hay muchas casas igual que están en peligro y nadie revisa, nadie viene acá. Nos sentimos abandonados por parte de las autoridades», declaró un vecino. El testimonio es contundente: «Tienen que morir alguien para que puedan venir un rato, después no pasó nada».
Esta queja evidencia un patrón recurrente en distritos populares donde las obras de prevención brillan por su ausencia. El comisario John Rojas Palacios se reunió con altos mandos para informar sobre los hechos y posteriormente brindará un balance oficial, aunque los vecinos exigen acciones concretas más allá de los informes burocráticos.



