La Policía detuvo a trabajadores del penal por su presunta complicidad en la fuga de Krisman Nizama Ponce, quien huyó el sábado por la noche tras hacer un forado en el tópico psiquiátrico
El Instituto Nacional Penitenciario (INPE) detuvo a cinco agentes del penal de Piura por su presunta participación en la fuga de Krisman Félix Nizama Ponce, un interno de 31 años recluido por extorsión que recibía tratamiento psiquiátrico. Los trabajadores permanecen bajo investigación por el delito de favorecimiento de fuga. El recluso escapó a través de un forado en la puerta del tópico médico durante el turno de vigilancia de los agentes ahora detenidos. El caso evidencia graves fallas en la seguridad penitenciaria y los controles internos del establecimiento.
Cinco agentes enfrentan cargos por favorecimiento de fuga
El Comunicado N.º 56-2025 del INPE identificó a los detenidos como Percy Elvis Salón Villa, Walter Ángelo Caicay Reyes, Julio Ronald Chumacero Niño, José Armando Trujillano Samamé y Juan Carlos Santos Hinostroza. Las investigaciones iniciales apuntan a una posible colusión interna que facilitó la huida del recluso. Nizama Ponce aprovechó un forado en la parte inferior de la puerta de acceso al tópico médico para escapar.
El interno cumplía condena por extorsión y había sido diagnosticado con una condición psiquiátrica. Esto le daba autorización para recibir atención médica especializada dentro del recinto. Debía trasladarse bajo supervisión constante, pero el forado en la puerta permitió su fuga.
INPE refuerza seguridad y busca al fugitivo
El INPE anunció medidas inmediatas para reforzar la seguridad interna y externa en el penal de Piura. «El INPE reitera su compromiso con el principio de autoridad en todas las cárceles del país», señala el comunicado oficial. Las unidades de inteligencia penitenciaria y la Policía Nacional intensificaron la búsqueda del interno fugado con apoyo de las comisarías de la región.
Las autoridades dispusieron operativos de control en las salidas de la ciudad y carreteras cercanas. Sospechan que Nizama Ponce pudo recibir apoyo externo para su fuga.
Crisis estructural del sistema penitenciario
La fuga reaviva el debate sobre la crisis del sistema penitenciario peruano. El hacinamiento, la corrupción y la precariedad del personal de seguridad marcan esta crisis. Expertos advierten que la falta de capacitación, los bajos salarios y las deficiencias tecnológicas facilitan los actos ilícitos.
El penal de Piura ha sido escenario de diversos hechos irregulares en años recientes. En 2024 capturaron a trabajadores implicados en el ingreso de objetos prohibidos. En 2023 desbarataron una red que coordinaba extorsiones desde el interior. Las autoridades judiciales dispusieron que los cinco agentes sean puestos a disposición de la Fiscalía Anticorrupción.