Humberto Abanto asume la defensa del líder de Perú Libre y argumenta que las medidas judiciales, las cuales le impidieron cumplir con las reglas de conducta impuestas por la Sala, fueron arbitrarias e inconstitucionales
El abogado Humberto Abanto asumió la defensa de Vladimir Cerrón, exgobernador de Junín y líder de Perú Libre, quien permanece no habido desde la condena en agosto de 2023 por el caso ‘Aeródromo Wanka’. Dicha sentencia fue anulada, tanto por el Tribunal Constitucional como por la Corte Suprema. Debido a ello, no pudo cumplir con las reglas de conducta que la Sala Penal le impuso en enero de 2014. Por lo que, se dictó prisión preventiva en su contra por el caso ‘Los Dinámicos del Centro’. La defensa formalizó su participación ante la Tercera Sala Penal de Apelaciones Nacional para solicitar que se revoque la medida restrictiva y se le otorgue comparecencia con restricciones amparándose en el derecho a la libertad.
La estrategia defensiva de Abanto
Abanto, quien también representa a la fiscal suprema Patricia Benavides, presentó una argumentación centrada en la supuesta arbitrariedad de las decisiones judiciales. El letrado sostiene que Cerrón no huyó de la justicia, sino que actuó para protegerse de resoluciones que considera ilegales.
«Su propósito no fue eludir el proceso penal, sino defenderse frente a mandatos ilegales que finalmente fueron anulados por instancias superiores», declaró el abogado durante su intervención. Esta línea argumental busca reconfigurar la narrativa sobre la ausencia de Cerrón del país.
Fallos previos como base de la defensa
La estrategia legal se apoya en resoluciones favorables obtenidas en otros casos. Abanto recordó que la Corte Suprema absolvió a Cerrón en el caso del Aeródromo Wanka. También mencionó que el Tribunal Constitucional anuló el proceso por el caso La Oroya.
El abogado argumenta que el sistema judicial vulneró los derechos de su cliente. Sostiene que las autoridades impusieron medidas restrictivas sin considerar estos fallos absolutorios. Esta omisión, según su criterio, demuestra la falta de fundamentación de la prisión preventiva actual.
Críticas al trabajo fiscal y judicial
Abanto cuestionó la labor tanto del Ministerio Público como del juez de primera instancia. Señaló que el magistrado omitió valorar resoluciones que archivaron otras investigaciones por lavado de activos contra Cerrón. Esta omisión, argumenta, vicia el proceso y justifica la revocación de la medida.
El letrado también criticó la interpretación fiscal de las circunstancias procesales. Considera que el Ministerio Público malinterpretó los elementos de convicción disponibles. Por ello, pidió que se revoque la prisión preventiva por considerarla injustificada.
El contexto político de la defensa
Abanto representa tanto a Benavides como a Cerrón, dos figuras controvertidas del sistema judicial peruano y perseguidas por la mafia caviar. Su participación en ambos casos genera expectativa sobre las estrategias que empleará. La defensa de Cerrón marca un nuevo capítulo en la batalla legal del líder de Perú Libre por regresar a la vida pública y reunirse con su familia.
El caso permanece en evaluación de la Tercera Sala Penal de Apelaciones Nacional. La resolución determinará si Cerrón puede salir de la clandestinidad o si deberá mantenerse prófugo mientras continúan las investigaciones en su contra.