Líder norcoreano Kim Jong-un ordena reemplazar equipos obsoletos por tanques «ultramodernos» en lo que denomina «segunda revolución» militar
El líder norcoreano Kim Jong-un supervisó personalmente una fábrica estratégica de producción de tanques, donde exigió acelerar la modernización del arsenal blindado del país. La visita marca un nuevo paso en el programa de fortalecimiento militar de Pyongyang.
Visita estratégica a complejo militar
Durante el recorrido, Kim examinó los avances en la producción de vehículos blindados y tecnologías clave. La agencia estatal KCNA destacó los «grandes progresos» en el desarrollo de tanques con mayor capacidad combativa. El mandatario revisó personalmente los procesos de fabricación.
Llamado a la modernización
Kim ordenó reemplazar urgentemente los equipos blindados del siglo XX por sistemas «ultramodernos». Subrayó la necesidad de producir tanques de gran tamaño y cañones autopropulsados de última generación. Esta renovación forma parte de su plan de «segunda revolución blindada».
Objetivos estratégicos
El programa busca fortalecer las capacidades ofensivas del ejército norcoreano ante tensiones regionales. Expertos señalan que Pyongyang acelera su rearme pese a sanciones internacionales. La modernización incluye mejoras en movilidad, potencia de fuego y sistemas electrónicos.
Contexto regional
La visita ocurre en medio de ejercicios militares conjuntos entre Corea del Sur y Estados Unidos. Corea del Norte considera estas maniobras como una amenaza directa a su seguridad. Analistas ven la movida como respuesta al fortalecimiento aliado en la región.
Desafíos tecnológicos
Aunque Pyongyang muestra avances, especialistas dudan de su capacidad para producir sistemas realmente modernos. El embargo tecnológico limita el acceso a componentes clave. Sin embargo, Corea del Norte ha demostrado habilidad para desarrollar armas con recursos limitados.
Próximos pasos
Se espera que el ejército norcoreano presente pronto los nuevos modelos de tanques en desfiles militares. La modernización blindada complementa otros programas de armamento avanzado, incluidos misiles balísticos y potenciales ensayos nucleares.
El impulso a las fuerzas blindadas refleja la doctrina militar de autosuficiencia norcoreana. Mientras las tensiones persistan en la península, Pyongyang continuará priorizando el desarrollo de capacidades disuasivas propias, según analistas.