La comunidad estudiantil de filosoía de la UNMSM exige la separación inmediata de dos profesores del curso Cosmovisión Andina y demanda reformas en la malla curricular: Zenón Depaz y Carlos Mora
Los estudiantes de Filosofía de la Universidad Nacional Mayor de San Marcos se organizan este viernes 5 de diciembre para protestar contra lo que califican como mediocridad y arbitrariedad en su formación académica. El Centro de Estudiantes de Filosofía junto con el colectivo B25 Filosofía convocan a un plantón en el Frontis de la Facultad de Letras y Ciencias Humanas a la una de la tarde.
La protesta tiene como eje central dos demandas concretas que los estudiantes consideran urgentes. La primera es la separación de los docentes Zenón Depaz y Carlos Mora, quienes imparten el curso de Estudios Generales Cosmovisión Andina. La segunda apunta a una reforma profunda de la malla curricular, que según los manifestantes presenta deficiencias graves en su contenido formativo actual.
Una cátedra bajo cuestionamiento
Los estudiantes sostienen que la calidad de la enseñanza en Cosmovisión Andina es pésima. Denuncian que los profesores cancelan clases de manera arbitraria, lo que afecta directamente su proceso de aprendizaje. Además, acusan una falta total de comunicación y consideración hacia ellos como estudiantes.
Este no es un reclamo aislado ni caprichoso. La comunidad estudiantil argumenta que el contenido del curso no responde a las necesidades formativas actuales. Las deficiencias son notables, dicen, y representan un obstáculo en su desarrollo académico. La combinación de mala enseñanza, desorganización y falta de respeto a sus derechos académicos construye el fundamento de su movilización.
Reforma curricular: una necesidad impostergable
La segunda consigna del plantón amplía el horizonte de la protesta. Los estudiantes identificaron problemas estructurales en la malla curricular de Filosofía que trascienden un solo curso. La exigencia de reforma no surge de la nada sino de una evaluación crítica de su formación universitaria.
Las deficiencias curriculares, según su análisis, limitan su preparación profesional. Los contenidos desactualizados o mal diseñados impiden que la carrera cumpla con su función formativa. Esta demanda revela una conciencia estudiantil que no se conforma con denunciar casos puntuales sino que busca transformaciones de fondo.
La convocatoria cierra con una consigna clara: «¡Estudiar y Luchar es Deber Estudiantil!». El plantón del viernes representa un acto de dignidad académica. Los estudiantes sanmarquinos demuestran que defender la calidad educativa es defender su futuro profesional y su derecho a una formación digna en la universidad pública más importante del país.
