La adversidad se le puso en frente cuando era su última oportunidad para postular a la Beca 18. No se rindió. Ahora estudia la carrera de sus sueños: Medicina Humana
Era la quinta vez que Frank Cubas Becerra postulaba a la Beca 18 del Programa Nacional de Becas y Crédito Educativo (Pronabec), y también la última. A sus casi 22 años, su sueño de estudiar Medicina Humana parecía escapársele de las manos. Ya no podía pagar una academia para prepararse, así que repasó por su cuenta sus apuntes y libros para rendir el Examen Nacional de Preselección.
Pero en septiembre de 2024, a solo dos meses de la prueba, un viaje en carretera terminó en un trágico accidente. Frank sufrió diversas fracturas, entre ellas en ambas piernas. Los médicos hicieron todo lo posible para que pudiera volver a caminar, pero el dolor era constante.

El 1 de diciembre de 2024, día del examen, aún dependía de una silla de ruedas. ¿Se presentaría o no? “Ni lo dudé un instante”, recuerda. Su familia pidió una ambulancia para trasladarlo al local de evaluación en Tarapoto, pero esta nunca llegó. Entonces, lo subieron como pudieron a un mototaxi. Frank alcanzó a entrar solo segundos antes de que cerraran las puertas.
“Durante esas dos horas sentía punzadas de dolor, pero recordaba las oraciones que había hecho con mi familia. Eso me dio tranquilidad para resolver el examen”, relata. Poco después, llegó la noticia que cambiaría su vida: había ganado la Beca 18 para estudiar Medicina Humana en la Universidad Científica del Sur (UCSUR), sede Los Olivos, en Lima.

El inicio en la capital no fue fácil. Todo era nuevo —la comida, el clima, la forma de relacionarse de las personas— y debía afrontarlo lejos de su familia, justo cuando más la necesitaba por su estado de salud. “Mi mamá pudo quedarse unas semanas, pero después tuve que arreglármelas solo. Hacer actividades domésticas era muy complicado, incluso agacharme me resultaba doloroso”, recuerda. Hoy se moviliza con muletas para asistir a clases, mientras continúa su recuperación.
A pesar de las dificultades, Frank culminó con éxito su primer ciclo universitario. “Tuve buenos compañeros y profesores. Siempre estaban dispuestos a ayudarme con cualquier duda”, dice agradecido.

Él comparte su historia porque quiere motivar a otros jóvenes a no rendirse. “Espero que valoren más su salud y las oportunidades que tienen. Muchas veces, aun estando bien, no se esfuerzan lo suficiente. Yo quiero inspirarlos a seguir estudiando”, afirma con convicción.
El Pronabec, del Ministerio de Educación, a través de la Beca 18, permite que talentos de alto rendimiento académico y bajos recursos económicos, así como en situación de vulnerabilidad, accedan a educación superior de calidad. Con historias como la de Frank, reafirma su compromiso de transformar vidas y aportar al desarrollo del país.
Video con la historia de Frank Cubas: https://www.youtube.com/watch?v=KiUNEl9HlmU