• Dr. Renato Alegría, Sec. Gral. de DDHHAC, organización con sedes en USA y México que se encarga de velar por derechos de los más necesitados anuncia instalación de oficina en Surco, para monitorear realidad peruana
“La situación de los derechos humanos en el Perú atraviesa un momento crítico, especialmente tras las protestas que siguieron a la asunción a la presidencia de Dina Boluarte. Las denuncias de uso excesivo de la fuerza por parte de las fuerzas del orden, que dejaron decenas de muertos, principalmente en regiones históricamente marginadas, reflejan un patrón preocupante de criminalización de la protesta social, que preocupa a la comunidad internacional”.
Fue el análisis del Dr. Renato Alegría, secretario general de la Organización International Derechos Humanos y Anticorrupción International (de siglas en inglés DDHHAC), con sedes en Washington (EE.UU.) y México, al anunciar la próxima apertura de su oficina en Lima, programada para diciembre de 2025, en La Encalada, Surco.
“El establecimiento de esta sede representa un acto de responsabilidad moral con el Perú y con todos los pueblos olvidados por el Estado. No se trata solo de una oficina, sino de un espacio de acción concreta en favor de la justicia y la dignidad humana”, expresó.
El Dr. Renato Alegría, abogado internacional con triple nacionalidad (peruana, mexicana y estadounidense), dijo que, esta organización forma parte de su compromiso con la defensa de los derechos humanos, la lucha contra la corrupción y la pobreza, y la construcción de una sociedad más justa y solidaria que tendrá relaciones bilaterales con la Embajada de Estados Unidos a fin de gestionar las posibles vulneraciones de los derechos humanos y de las entidades que se encuentren en actos de corrupción para denunciarlas ante el Ministerio Público.
“El establecimiento de esta sede representa un acto de responsabilidad moral con el Perú y con todos los pueblos olvidados por el Estado. No se trata solo de una oficina, sino de un espacio de acción concreta en favor de la justicia y la dignidad humana. La corrupción no tiene fronteras; la justicia tampoco debe tenerlas”, señaló.
Precisó que, labor en la institución estará enfocada en fortalecer la promoción y defensa de los derechos humanos, así como en el seguimiento y denuncia de prácticas de corrupción que afectan el acceso a la justicia y la institucionalidad democrática. Con la apertura de esta filial en Lima, se buscará establecer una presencia activa que permita articular con organizaciones locales, monitorear casos emblemáticos y apoyar iniciativas que promuevan la transparencia y el respeto a los derechos fundamentales.
“Respetar los derechos humanos no es opcional: es el fundamento de cualquier democracia que aspire a ser legítima”, añadió.