Este domingo 1 de junio a las 13:00 horas, la Superintendencia Nacional de Migraciones iniciará el control migratorio en la nueva terminal de pasajeros del Aeropuerto Internacional Jorge Chávez, con el desafío de atender un total de 21 vuelos internacionales tan solo en la primera hora de servicio.
Esa primera hora coincidirá con una “hora punta atípica”, tras una pausa de 12 horas sin operaciones de acuerdo a lo programado. En total, se recibirán y despacharán 10 vuelos de llegadas y 11 de. salidas, respectivamente, con un estimado de 4,300 pasajeros.
La atención de ese flujo de pasajeros representa, un desafío debido a que el nuevo espacio asignado a control migratorio presenta una reducción del 20 % en la zona de llegadas y del 40 % en la zona de salidas, respecto al Terminal 1, lo que podría generar congestión temporal en las salas migratorias al acumularse varios vuelos consecutivos.

Para mitigar este impacto, Migraciones ha incrementado en 40 % su personal operativo e inició la implementación progresiva de 19 puertas electrónicas (e-gates) para ciudadanos peruanos mayores de edad y extranjeros residentes con pasaporte electrónico, detalló el superintendente nacional, Armando García.
Precisó que en salidas internacionales se ha pasado de 15 a 21 módulos de control migratorio y en llegadas de 24 a 33.
“Es importante precisar que el control migratorio no es equivalente a una garita de tránsito, es seguridad nacional. Por esa razón, en lo que va del año, más de 900 personas han sido inadmitidas por alertas o documentación irregular o incompleta”, afirmó.
Precisó que la saturación temporal que se pueda producir en los recintos migratorios es un resultado natural de un flujo elevado en espacios limitados.
El superintendente enfatizó que la atención de los pasajeros se realizará priorizando la agilidad sin comprometer los estándares de seguridad verificación e integridad documental.