Elmer Espinoza Alva (21) fue detenido portando arma de fuego en operativo conjunto PNP-Ejército. Se le vincula con el asesinato de guardias de seguridad en una mina en Pataz.
Las autoridades lograron capturar a Elmer Espinoza Alva, uno de los presuntos responsables de la masacre de 13 trabajadores en Pataz, La Libertad. El operativo, realizado por la PNP y el Ejército, también detuvo a Stalin Rojas Aguilar (28) en un bar de Pueblo Nuevo. Ambos portaban armas al momento de su arresto. Espinoza estaría vinculado al ataque del 26 de abril, cuando un comando armado ejecutó a guardias de seguridad en un socavón minero.
De Pataz a Pueblo Nuevo
El arresto se produjo en el kilómetro 2.3 de la carretera Ayalen, en el centro poblado Pueblo Nuevo. Los efectivos sorprendieron a Espinoza y Rojas en un establecimiento público, aunque aún investigan qué hacían allí.
«Se le halló una pistola a cada uno. Ambos serán investigados por los presuntos delitos de posesión, comercialización y fabricación ilícita de armas«, informaron fuentes policiales.
Vinculación con la masacre de Pataz
Espinoza sería parte del grupo que asesinó a 13 empleados de una empresa de seguridad en una mina de Pataz. El crimen, ocurrido el 26 de abril, se investiga como un caso de sicariato vinculado al crimen organizado.
No es el primer arresto relacionado. Las autoridades ya capturaron en Colombia a Miguel Antonio Rodríguez Díaz, alias ‘Cuchillo’, otro sospechoso clave.
Armas y delitos adicionales
Además de su posible participación en la masacre, ambos detenidos enfrentarán cargos por tenencia ilegal de armas. Las pistolas incautadas serán analizadas para determinar si se usaron en otros crímenes.
El caso sigue abierto. Las autoridades no descartan más capturas, pues creen que el ataque fue planeado por una estructura criminal mayor. Mientras tanto, Espinoza y Rojas quedaron a disposición del sistema judicial.
Un crimen que conmocionó al país
La masacre de Pataz reveló el nivel de violencia que rodea a la minería ilegal en la zona. Los trabajadores asesinados fueron emboscados dentro del socavón, sin posibilidad de defensa.
Ahora, con estas detenciones, las familias esperan justicia. Pero el caso sigue planteando preguntas: ¿Quién ordenó los asesinatos? ¿Qué intereses están detrás? Las investigaciones continúan.