En un inmueble ubicado a pocos metros de la sede de la Divincri Arequipa, agentes de la Policía Nacional incautaron más de un millón y medio de cigarrillos de procedencia ilegal, que estaban a punto de ser trasladados en un camión hacia Lima.
En atención a la denuncia de un vecino, personal de la Policía Fiscal intervino el inmueble ubicado en la avenida Libertad, distrito de Cerro Colorado, en cuya cochera se encontró el camión placa Z1A-851 que contenía decenas de cajas de cigarrillos de marcas Golden Beach y Campeao, que hicieron un total de un 1.12 millones unidades, valorizadas en S/1´680,000.
El conductor del vehículo, identificado como Wilson Quispe y su acompañante Elmer Cusacani, no contaban con la documentación que acredite la procedencia legal de los productos, por lo que se procedió a la incautación de los cigarrillos y a la intervención de los mismos por la presunta comisión de los delitos aduaneros.
Los detenidos, que formarían parte de la banda “Los Tabaqueros”, fueron trasladados a la comisaría de Mariscal Castilla para las investigaciones.

Las autoridades informaron que los productos, de fabricación paraguaya, fueron introducidos ilegalmente al país por la frontera con Bolivia. Estas mafias de contrabandistas operan de la mano de organizaciones criminales transnacionales vinculadas con delitos como sicariato, extorsión, trata de personas, entre otros.
Asimismo, indicaron que los contrabandistas captan a transportistas de carga para que, a cambio de importantes sumas de dinero, trasladen hacia Lima los productos ilegales, muchas veces utilizando caletas especialmente acondicionadas para tal fin.
Esta importante incautación se suma a los operativos ejecutados a lo largo del año por la Policía y agentes de Aduanas que han permitido interceptar millones de cigarrillos ilegales transportados bajo distintas modalidades por mafias criminales.
Revelador estudio
Según el estudio «Contrabando y Tráfico de Cigarrillos y Ropa Usada: Economías Ilegales y Amenazas a la Seguridad», revela que esta actividad ilegal en Perú es solo una pequeña parte de una estructura criminal más amplia y peligrosa, ya que las rutas y prácticas delictivas utilizadas por los contrabandistas de cigarrillos y ropa usada están estrechamente vinculadas con organizaciones criminales dedicadas al tráfico de drogas, armas y personas.
El contrabando y el tráfico, aunque diferentes, comparten métodos y actores. Mientras el contrabando implica la evasión de controles sobre productos legales, el tráfico se refiere a la comercialización de productos prohibidos o falsificados. Ambas actividades utilizan rutas que también son empleadas para el tráfico de drogas, armas y personas, creando un sistema interconectado que refuerza el crimen organizado.