Gamarra Colchado garantizó que los errores que presentaba el equipo no se corregían y que eso era del conocimiento de su jefa.
El extrabajador del laboratorio Medifarma, Álex Gamarra Colchado, sostuvo que el titulador automático Mettler modelo T90, máquina encargada de analizar el suero fisiológico producido por la empresa, presentó errores que no fueron corregidos.
“El equipo donde analizamos cloruros… venía produciendo errores, como fallas en la red, como saturación del electrodo, fuga del titulador, en la bureta con el que se titulaba el suero, entonces no solo mi persona sino todos los analistas que pasaban por el equipo, siempre al detectar un valor mal en su resultado, repetían el análisis», según declaró para un medio local.
Gamarra Colchado, declaró que las fallas que presentaba la máquina eran de conocimiento de su jefa.
«Mi jefa sabía que el equipo estaba fallando y tenían muchos problemas, de que (la máquina) ya había estado inoperativo porque recién, al empezar este problema, empezó a funcionar después de dos o tres meses, pero sí tenían conocimiento de que habían electrodos que estaban fallando, que habían buretas (instrumento para medir pequeñas cantidades de reactivo líquido) fallando y ellos mismos nos pedían o ellos sacaban las buretas nuevas y las instalaban para seguir trabajando porque teníamos sobrecarga de sueros en la sección», expresó.
La Fiscalía de Santa Anita investiga a extrabajador del laboratorio Medifarma por tener un presunto involucramiento en el caso del medicamento defectuoso que ha dejado siete fallecidos hasta el momento.
Por su parte, Medifarma no se ha pronunciado para responder las acusaciones de Gamarra Colchado. Sin embargo, han declarado que han presentado registro de las labores de mantenimiento a la Fiscalía.
Niega ser responsable
En la entrevista para el medio local, Gamarra Colchado aseguró que en el 2015 ingresó a Medifarma para ser auxiliar de lavado de los materiales de laboratorio, luego subió de cargo como analista del control de calidad, pero enfatizó que sabía del daño que provocaba el suero fisiológico defectuoso en las personas.
«No fue mi intención, no tuve conocimiento del daño que causaría dicho producto y producto que no sabía de ese daño. Nunca trabajé a mi propia voluntad querer alterar algo, fue una segunda opción que di en mi entrevista con los abogados y que hasta ahora me quieren hacer sentir como un asesino la cual no tienen idea ellos de cómo se trabaja en la sección», expresó.
