El tribunal condenó al expresidente Castillo y a tres exministros por conspiración para la rebelión tras los hechos del 7 de diciembre de 2022
El Poder Judicial dictó este jueves la sentencia completa contra el expresidente Pedro Castillo Terrones, quien recibió una condena de 11 años, 5 meses y 15 días de prisión por el delito de conspiración para la rebelión. La Sala Penal Especial de la Corte Suprema también sentenció a la expremier Betssy Chávez Chino y al exministro del Interior Willy Huerta con la misma pena, mientras que Aníbal Torres Vásquez, exasesor presidencial, recibió 6 años y 8 meses de cárcel. Los cuatro deberán pagar solidariamente una reparación civil de 12 millones de soles.
La conspiración del 6 de diciembre
El tribunal determinó que el 6 de diciembre de 2022, Castillo se reunió con Torres Vásquez y Chávez Chino para redactar el mensaje golpista. Las cámaras de Palacio de Gobierno registraron estos encuentros, prueba clave para establecer la conspiración.
Según una declaración testimonial, Chávez Chino exigió que el mensaje se transmitiera a través del Instituto Nacional de Radio y Televisión del Perú. Para ello, contactó al secretario general del Ministerio de Cultura esa misma noche y le ordenó buscar al jefe del IRTP.
Intento de movilizar a la Policía
El testimonio del exministro Willy Huerta reveló que Chávez Chino intentó disponer de la Policía Nacional para permitir el ingreso de manifestantes oficialistas a la Plaza de Armas. Esta coordinación también involucró al Ministerio de Defensa. La frase que utilizó para justificar las órdenes fue «es por orden del presidente».
El fallo judicial
La Sala Suprema estableció que el mensaje a la Nación del 7 de diciembre constituye una manifestación de que Castillo se arrogó el ejercicio del poder. «Los acusados hicieron un acuerdo para atentar contra el orden constitucional y se organizaron para cumplir un rol a fin de materializar el contenido del mensaje a la Nación», señaló el fallo.
El tribunal concluyó que «los hechos planteados configuran el delito de conspiración para una rebelión» y que los cuatro acusados «dolosamente se hicieron parte de esta conspiración ejecutando actos concretos y manifiestos». En los casos de Torres Vásquez y Huerta, el tribunal suspendió la ejecución de la pena hasta que la sentencia quede consentida en segunda instancia.



