- Dispositivo sin cables de última generación fue implantado exitosamente en asegurado que hoy lleva su vida con normalidad e incluso hace ejercicios.
Don Mario Aliaga, un asegurado de 75 años, vive con un marcapasos inalámbrico en el corazón, el cual le fue implantado por médicos del Hospital Nacional Guillermo Almenara, del Seguro Social de Salud (EsSalud), en una cirugía mínimamente invasiva que duró cerca de una hora.
Al igual que el popular Tony Stark del cómic Iron Man, que incluso ha llegado a ser estrella de una popular saga cinematográfica, pero en este caso debido a complicaciones cardíacas, Mario tiene una prótesis de metal en el corazón y recientemente se le ha implantado un marcapasos sin cables. Gracias a ello ahora lleva la vida casi con normalidad y lleno de vitalidad, tanto que hace ejercicios físicos que personas de su edad no suelen realizar.
“Me siento bien, agradezco a los médicos del hospital Almenara por esta intervención. Me siento como un Iron Man”, dice don Mario.
El Dr. Hael Fernández Prado, cardiólogo electrofisiólogo y coordinador de la Unidad de Arritmias del hospital Almenara de EsSalud, explicó que el paciente había sufrido infecciones graves derivadas de marcapasos convencionales con cables.
“Es un paciente de 77 años que ha estado hospitalizado por múltiples infecciones cardíacas. Ha tenido endocarditis y tuvo un proceso infeccioso cardíaco por un marcapasos con cables que le colocamos. Lo operamos por las infecciones severas y le pusimos una prótesis de metal en el corazón. Después planificamos un procedimiento para colocarle un dispositivo de estimulación, y decidimos optar por un marcapasos sin cables, mínimamente invasivo, para garantizar seguridad y calidad de vida en un caso de alto riesgo”, señaló el especialista.

El Dr. Fernández informó que ese procedimiento se realizó mediante un catéter muy pequeño que, bajo mínima sedación, permitió introducir la microcápsula directamente en el corazón. Este innovador marcapasos, que se ancla al tejido cardíaco, se encarga de regular los latidos en pacientes con bloqueos avanzados, evitando los problemas de infección asociados a los dispositivos tradicionales.
Hito en el país
El galeno señaló que este procedimiento representa un hito en el país, al incorporar tecnología de última generación que mejora el pronóstico y reduce los riesgos de infección en pacientes vulnerables.
El doctor Fernández resaltó que este tipo de tecnología está especialmente indicada para pacientes con enfermedad renal crónica, en diálisis, inmunosuprimidos o con antecedentes de infecciones severas por dispositivos.
“No todos los pacientes requieren este marcapasos, pero entre un 15 % y 20 % podría beneficiarse de él, logrando una mejor calidad de vida frente a enfermedades degenerativas del sistema eléctrico del corazón”, detalló.
Don Mario, padre de 4 hijos, fue dado de alta al día siguiente de la intervención y regresó a casa con un corazón estabilizado y seguro, lo cual representa no solo un triunfo médico, sino también un nuevo comienzo para él y su familia.
Este logro se suma al compromiso del Servicio de Cardiología y de la Unidad de Electrofisiología del hospital Almenara, que vienen incorporando procedimientos de alta complejidad con un enfoque mínimamente invasivo. Gracias a ello, los pacientes acceden a terapias modernas que reducen tiempos de hospitalización, previenen complicaciones y fortalecen su confianza en la atención especializada del nosocomio.
Importancia de la tecnología
“Estamos contentos con la evolución de nuestro paciente y convencidos de que la medicina debe caminar de la mano con la tecnología para devolver esperanza y calidad de vida”, concluyó el doctor el Dr. Fernández.
Este tipo de intervenciones se enmarcan en el incremento de la producción asistencial y en la transformación digital, que son dos de los principales ejes de la gestión del Dr. Segundo Acho Mego, presidente ejecutivo de EsSalud.