El candidato republicano hablaba ante sus seguidores en la comunidad de Butler cuando sufrió el atentado
El expresidente Donald Trump dirigía uno de sus tradicionales discursos en lo que sería su último mitin antes de llegar el próximo lunes a la convención republicana donde será ratificado como el candidato presidencial.
Las palabras de Trump fueron silenciadas por el ruido de unas detonaciones que se escucharon a cielo abierto, lo que obligó al candidato a parar y llevarse la mano al rostro para dejar ver un hilo de sangre que le corría por las mejillas.
De inmediato, su círculo de seguridad más cercano le cobijó para protegerle en el suelo y poder evacuarlo del sitio una vez que se despejó la zona y el servicio secreto tomó el control de la situación y aseguro condiciones para sacarlo a toda prisa del escenario de campaña en Butler, Pensilvania, a unas 30 millas al norte de Pittsburgh.
Dos personas fallecieron en el tiroteo ocurrido durante el mitin del expresidente de Estados Unidos y precandidato republicano, Donald Trump. Entre los muertos, está el agresor, informó el periódico The Washington Post.
Donadl Trump, quien fue aparentemente alcanzado en la oreja por una bala y rápidamente evacuado por el Servicio Secreto, está fuera de peligro y siendo examinado por los servicios médicos, aseguró su campaña.
Richard Goldinger, fiscal del condado de Butler, lugar donde se estaba desarrollando el mitin del republicano, detalló que dos personas murieron, incluido el aparente tirador, indicó el medio.
El precandidato republicano se encontraba dando un mitin en Butler (Pensilvania) cuando tuvo que ser evacuado del podio tras sufrir un aparente atentado. Llevaba solo diez minutos sobre el escenario y después de que sonaran aparentes disparos, fue sacado del mismo con sangre en la oreja y parte de la cara.
Una fuerte presencia policial, del Servicio Secreto y de helicóptero rodeó la zona y protegió al exmandatario. Trump se llevó la mano al oído tras el sonido de un supuesto tres supuestos disparos, tras el que se sucedieron varios más entre gritos.
El portavoz del republicano, Steven Cheung, aseguró en un comunicado que Trump “está bien y está siendo atendido en una instalación médica local”.
También el Servicio Secreto, que cuida a Trump por ser exmandatario, informó de en un comunicado que el republicano “se encuentra a salvo” y que hay una investigación en curso sobre lo sucedido.