Tras los reclamos del Partido Aprista Peruano, por la decisión del Consejo de Lima de nombrar el Parque de la Cultura como «Parque Luis Castañeda», la Municipalidad Metropolitana de Lima (MML) decidió dejar sin efecto la ordenanza que disponía dicho cambio.
Según se conoció, la decisión fue aprobada por unanimidad durante la sesión del Consejo Municipal llevada a cabo este viernes 27 de octubre. Sin embargo, no tuvo la presencia del alcalde Rafael López Aliaga, que fue quien dispuso el renombramiento de dicho lugar.
Por disposición del burgomaestre, este espacio público iba a llevar el nombre de Luis Castañeda Lossio, quien fue investigado por presuntos aportes de las constructoras brasileñas OAS y Odebrecht, una decisión que desató una cadena de reclamos en la militancia aprista, que pidió no agraviar la memoria de uno de sus máximos líderes y consideró incluso que era el inicio de una “guerra” política.
Después de la votación, los regidores aplaudieron la revocatoria del acto normativo, mientras que la concejala Roxana Rocha, quien lideró la moción respaldada por 26 firmas para no variar la denominación del parque, invocó al pleno a “mantener y respetar el legado” de Luis Alberto Sánchez.
A inicios de semana, la secretaria general institucional del APRA, Belén García, había enviado un documento al burgomaestre para solicitarle dar marcha atrás a la iniciativa, una solicitud que fue secundada por Ricardo Pinedo, exsecretario personal de Alan García, quien ocupó el sillón presidencial en dos mandatos.
Sin embargo, el exlegislador Mauricio Mulder, presidente de la Comisión Política del APRA, agudizó el enfrentamiento. “Solo una súbita enfermedad mental o un arrebato incontrolado puede explicar la estupidez política que quiere perpetrar el alcalde. Nos declara la guerra gratuitamente. Guerra tendrá”, lanzó desde la misma red social.
Desde la Casa del Pueblo, un grupo de partidarios deslizó la posibilidad de realizar una “protesta de indignación” si su petitorio no era concedido. Imágenes difundidas por Al Estilo Juliana evidenciaron que la placa recordatoria colocada en 2010 —cuando Castañeda Lossio era alcalde y García, presidente— había desaparecido y que el busto estaba regado por excremento de aves.
