Han transcurrido diez meses desde que los restos de la enfermera Kimberly Tapia fueron encontrados en un condominio en Cieneguilla. La joven profesional fue asesinada por su pareja, Joshua Huaman, pero las autoridades aún no dictan sentencia y desde el Colegio de Enfermeros del Perú solicitaron todo el peso de la ley para el feminicida.
La Decana del Colegio de Enfermeros del Perú, Elizabeth Alvarado, destacó el hecho que Joshua Huamán haya confesado ser el autor del homicidio y que antes haya intentado matar a una amiga de la infancia.Además el confeso feminicida acabó con la vida de la muchacha el día que cumplían un mes de relación.
“Lamentamos mucho este crimen y también demandamos justicia. Como Colegio de Enfermeros del Perú estamos siguiendo este lamentable caso”, dijo Elizabeth Alvarado.
JUSTICIA Y CELERIDAD
Kimberly Tapia trabajó en el Hospital de Chancay. En un mensaje en las redes sociales, sus colegas y compañeras de trabajo exigieron celeridad en las investigaciones. “En todo este tiempo no vemos que la justicia se haya hecho presente frente a la muerte de un ser muy valioso que estaba a cargo de muchas personas. Me dirijo a las autoridades judiciales sobre todo para que vean el caso y se haga justicia.Este diario consultó con agentes de la División de Homicidios y nos dieron detalles del perfil psicológico de Joshua Huamán. “Indicaron que su comportamiento corresponde al de una persona narcisista, fría y sin arrepentimientos”.
ASESINO EN SERIE
Las pruebas en su contra fueron contundentes y al verse acorralado el confeso asesino de 28 años solicitó hablar con los agentes en los servicios higiénicos, el único lugar sin cámaras de vigilancia. Allí confesó: “Sí, yo le corté el cuello”. Según los especialistas, esta solicitud del ‘Monstruo de Cieneguilla’ “demuestra que es una persona que quiere controlar el escenario” y añadió que tales actitudes son características de un “asesino en serie”.