Buses eléctricos operan entre Aguas Calientes y Machu Picchu, transportan a 300 turistas al día y reducen 40 toneladas de CO₂ al año.
El turismo en la ruta entre Aguas Calientes y Machu Picchu inicia una nueva etapa con la incorporación de buses eléctricos, fruto de un convenio entre Pluz Energía y Consettur. Estos vehículos, con capacidad para 300 pasajeros diarios y cero emisiones, ya operan desde enero de 2025. El Ministerio de Transportes y Comunicaciones respalda la medida y proyecta su ampliación a nivel nacional. Esta iniciativa busca reducir el impacto ambiental en la ciudadela inca, mientras asegura un transporte eficiente y sostenible para visitantes nacionales y extranjeros.
Cambio eléctrico en la ruta a Machu Picchu
La transición hacia la electromovilidad ya está en marcha en uno de los destinos más visitados del mundo. Pluz Energía y Consettur Machupicchu firmaron un acuerdo que permitió la incorporación de los primeros dos eBuses en la ruta entre el pueblo de Machu Picchu (Aguas Calientes) y la Llaqta, uno de los tramos más transitados por el turismo nacional e internacional.
Los buses eléctricos entraron en operación en enero de 2025. Cada unidad tiene una autonomía de 250 kilómetros por carga y puede realizar hasta 10 recorridos diarios. En total, transportan a más de 300 personas al día, sin emitir gases contaminantes. Esto representa una reducción anual de aproximadamente 40 toneladas de dióxido de carbono.
Respeto por el entorno y eficiencia energética
La implementación de los buses eléctricos no solo mejora la experiencia del turista, también apunta a reducir el daño ambiental en una zona reconocida como Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Como parte del acuerdo, se instalaron dos estaciones de carga eléctrica en el taller de Consettur para garantizar un funcionamiento continuo de los vehículos.
El ministro de Transportes y Comunicaciones, Raúl Pérez Reyes, participó en la presentación de la flota y anunció que su cartera trabaja en una estrategia para implementar la electromovilidad a nivel nacional. En su intervención, resaltó que esta experiencia en Cusco servirá de modelo para otras regiones del país.
Sostenibilidad ante la alta demanda turística
La incorporación de estos buses se da en un contexto de alta demanda turística. En temporada alta, el aforo permitido a Machu Picchu alcanza hasta 5600 visitantes por día, según lo establecido por el Ministerio de Cultura. Esta medida forma parte del Protocolo para la gestión de visitas a la Llaqta, cuyo objetivo es proteger el patrimonio arqueológico frente al exceso de turistas.
El ministro de Cultura, Fabricio Valencia, firmó la Resolución Ministerial N.º 000404-2024-MC, que oficializa estas medidas de control de aforo para el 2025. Así, mientras se recibe a miles de turistas cada día, se busca un equilibrio entre desarrollo económico, sostenibilidad ambiental y conservación del legado histórico.
Con la operación de estos buses eléctricos, Machu Picchu se convierte en referente de movilidad sostenible en el país. La articulación entre sector público y privado demuestra que es posible avanzar hacia un modelo de turismo responsable, donde se priorice la preservación del patrimonio sin sacrificar eficiencia ni acceso.
