La Autoridad Nacional de Control del Ministerio Público dio marcha atrás a la medida cautelar que apartó al fiscal durante seis meses de sus funciones.
La controvertida figura del fiscal José Domingo Pérez regresa al centro de las investigaciones de corrupción más importantes del país. Tras un mes de suspensión, el magistrado retomará sus funciones en el Equipo Especial Lava Jato luego que la Autoridad Nacional de Control (ANC) declarara fundada su apelación.
Decisión revierte la suspensión impuesta en abril
Este lunes 5 de mayo, la Dirección General de Apelaciones de la ANC emitió la resolución N° 293-2025 que anula la suspensión preventiva contra Pérez, permitiéndole reincorporarse desde mañana a sus labores.
La decisión significa un revés para las autoridades disciplinarias que lo apartaron el pasado 7 de abril, acusándolo de cometer una presunta «falta muy grave» en el ejercicio de sus funciones.
El fallo no solo restituye al fiscal, sino que además incluye un llamado de atención al responsable de la Unidad de Procedimiento Disciplinario de la ANC, medidas exhortándolo a actuar con mayor prudencia al imponer cautelares.
La controversia detrás de la suspensión
La suspensión inicial estuvo firmada por José Fernández Jerí, presidente de la ANC, quien argumentó que Pérez había intervenido indebidamente en una investigación contra el abogado Arsenio Oré.
Según la acusación disciplinaria, el fiscal habría continuado con diligencias a pesar de estar impedido de participar en el caso. Esta situación fue calificada como una infracción grave a los protocolos fiscales.
Pérez rechazó enfáticamente estas imputaciones, calificando la medida como «injusta y abusiva». En sus declaraciones públicas, sostuvo que actuó siguiendo órdenes expresas de su superior inmediato.
Defensa basada en la cadena de mando
«No es que yo agarro como un niño caprichoso y digo voy a investigar al señor Arsenio Oré», manifestó Pérez durante su defensa pública, explicando que su participación respondía a instrucciones específicas.
El fiscal aclaró que su superior, Rafael Vela, le ordenó continuar con la investigación después de que Oré solicitara su exclusión del proceso. Este argumento parece haber sido determinante para la anulación de su suspensión.
La decisión revitalizar al cuestionado Equipo Lava Jato en un momento crítico para las investigaciones de corrupción relacionadas con Odebrecht, permitiendo que uno de sus miembros más polémicos pero efectivos retome el control de casos sensibles.
Un fiscal controvertido
A lo largo de su carrera, Domingo Pérez se ha enfrentado a múltiples intentos de apartarlo de las investigaciones de alto perfil que lidera. Sus métodos agresivos y su inflexibilidad han generado tanto admiradores como detractores.
Sus críticos lo señalan por supuestamente politizar las investigaciones y por un estilo confrontacional que frecuentemente genera tensiones institucionales. Sin embargo, sus defensores destacan su tenacidad para perseguir casos de corrupción que involucran a intereses poderosos.
La reincorporación de Pérez representa un respiro para el Equipo Especial, pero también augura la continuación de un estilo de trabajo que ha polarizado a la opinión pública peruana y al propio sistema judicial.
