Expertos en protección de datos alertan que la filtración de datos del Reniec pudo ser aprovechada por organizaciones políticas para registrar afiliados falsos, mientras crecen las críticas por la falta de seguridad en el manejo de información sensible por parte del Estado.
La reciente filtración de datos personales del Reniec de más de 15 millones de peruanos, incluyendo direcciones, fotos y firmas, podría estar vinculada a las denuncias de afiliaciones políticas irregulares, según advierte la abogada Fátima Atoche, experta en derecho digital. En entrevista con Mesa de Prensa, Atoche explicó que, con la información expuesta, grupos políticos habrían podido inscribir adherentes sin su consentimiento ante el Jurado Nacional de Elecciones (JNE), aprovechando fallas en los mecanismos de verificación.
Fallas en el sistema y responsabilidad institucional
Atoche destacó que, aunque existe normativa para proteger los datos personales, su aplicación ha sido deficiente. «Con solo el nombre y DNI, e incluso firmas no auténticas, se pueden realizar trámites como afiliaciones partidarias», señaló. La experta cuestionó la falta de monitoreo en el Reniec, que permitió la descarga masiva de información sin detectar anomalías. «En el sector privado hay protocolos estrictos de acceso; el Estado, que maneja datos sensibles, debería ser más riguroso», agregó.
La abogada también criticó la respuesta de las autoridades tras la filtración. «Reniec y el Ministerio del Interior se limitaron a negar un hackeo, pero no explicaron cómo un usuario interno pudo extraer los datos. El verdadero problema es la ausencia de controles biométricos y límites de acceso según funciones», afirmó. Subrayó que, independientemente de quién cometió el hecho, la responsabilidad última recae en el Reniec como custodio de la información.
¿Cómo verificar si mis datos fueron afectados?
Atoche recordó que los ciudadanos pueden ejercer sus derechos ARCO (acceso, rectificación, cancelación y oposición) para solicitar al Reniec detalles sobre el uso de su información. «Cualquier persona puede preguntar si sus datos fueron expuestos en esta u otras filtraciones. La institución tiene 20 días hábiles para responder», precisó. Sin embargo, advirtió que la venta ilegal de datos es un problema recurrente: «No es la primera vez que ocurre. En plataformas como Telegram, las fichas del Reniec se comercializan por montos mínimos».
La especialista urgió a implementar medidas como la autenticación biométrica y auditorías constantes para prevenir nuevos incidentes. Mientras tanto, el caso reabre el debate sobre la seguridad de la información estatal y los riesgos de su uso indebido en procesos electorales.