Representantes de 500 mil familias de Villa María del Triunfo (VMT), Villa El Salvador (VES) y San Juan de Miraflores (SJM) salieron ayer a las calles para exigir que se les instale agua potable y para demandar la renuncia del presidente de Sedapal Jorge Gómez Reátegui, y la jefa de obras, Paula Olarte Aguilar. Desde hace 18 años esos pobladores vienen luchando por el líquido elemento y ayer volvieron a salir a las calles para alzar su voz de protesta ante la indolencia de las autoridades de Sedapal que en vez de facilitar la ejecución de la mega obra “La Rinconada”, utilizan medidas dilatorias para que no se culmine este proyecto de casi 1,200 millones.
El presidente de la Comisión del Súper Esquema de los 300, Carlos Chávez, sostuvo que “la conducta arbitraria e irresponsable del presidente de Sedapal, busca paralizar la obra, perjudicando a medio millón de familias que se quedarán sin acceso al agua”.
Los dirigentes realizaron la marcha de sacrificio, para exigir el cese inmediato del presidente de Sedapal, Ing. Jorge Gómez Reátegui y la Ing. jefa de Obra, Paula Olarte Aguila. Que se contrate a una consultora especializada en la elaboración de expedientes técnicos de obras de saneamiento, que en el menor tiempo posible elabore los 74 expedientes técnicos y de solución técnica al centenar de interferencias e indefiniciones que presenta la obra actualmente y con ello se consiga que la obra sea ejecutable. La anulación de las penalidades que Sedapal pretende cobrar ilegalmente al Consorcio San Miguel o se les cobre en la etapa de liquidación, como lo permite la ley y se evite con ello la quiebra económica de la Obra.Y la intervención de la presidenta de la República y del ministro de Vivienda, a fin de evitar la paralización de esta mega y bicentenaria obra de saneamiento “La Rinconada”.
LUCHA PERMANENTE.
Los pobladores beneficiarios del agua y alcantarillado y los trabajadores de Construcción Civil se declaran en asamblea y lucha permanente por la continuidad de la obra de “La Rinconada”.
