El último jueves 21 de noviembre, a las 8:30 p.m., la Plaza a la Bandera, en el distrito de Pueblo Libre, fue el escenario de una multitudinaria protesta organizada por diversas asociaciones de moteros de todo el Perú. Bajo el lema «SOMOS MOTOCICLISTAS, NO SOMOS DELINCUENTES», motociclistas de Lima y provincias se reunieron para alzar su voz contra la estigmatización y discriminación hacia los usuarios de motocicletas.
En el distrito de Pueblo Libre, la alcaldesa Mónica Tello expresó su desacuerdo con las medidas del Gobierno que prohíben la circulación de dos personas en una motocicleta durante estados de emergencia en distritos o regiones. Por el contrario, considera que la solución más efectiva radica en reforzar los operativos policiales y fomentar un trabajo conjunto y coordinado entre los municipios y la Policía Nacional del Perú para combatir la delincuencia de manera integral. La alcaldesa lideró la protesta motera siendo la única autoridad local que se encuentra a favor de los moteros y sus diversas asociaciones.
UNA PROTESTA CONTRA LA ESTIGMATIZACIÓN: Los motociclistas buscan visibilizar los prejuicios sociales que los asocian injustamente con la delincuencia. La concentración tiene como objetivo sensibilizar a la población y exigir un cambio en las percepciones que afectan la imagen de quienes usan este medio de transporte. “No a la estigmatización, No a la discriminación y No a la incriminación por manejar una moto” son los pilares de esta manifestación pacífica.
RECHAZO A RESTRICCIONES DISCRIMINATORIAS: La protesta también es un llamado de atención al Gobierno ante las recientes medidas que buscan prohibir el uso de motocicletas con dos ocupantes en distritos o regiones bajo estado de emergencia. Según las asociaciones convocantes, estas restricciones vulneran los derechos de los ciudadanos y promueven la exclusión de un importante sector de la población que utiliza motos como medio de transporte, trabajo y recreación.
UN LLAMADO A LA REFLEXIÓN: Esta manifestación no solo es un acto de protesta, sino también una invitación a reflexionar como sociedad sobre el impacto de las decisiones políticas y las narrativas que afectan injustamente a colectivos que contribuyen al desarrollo del país.