PALABRA DE HONOR
Por: Óscar Valdés Dancuart
Expresidente del Consejo de Ministros
@oscarevaldes
La coyuntura existente y la alianza cómplice entre el Ejecutivo y Legislativo harán que tengamos que soportar a ambos hasta el 2026, por ello no es difícil predecir que tendremos una economía en caída, una pobreza en aumento, un deterioro de las instituciones y la conducción de los poderes del Estado, sus ministerios e instituciones a cargo de gente poco preparada y muchas veces carentes de principios y valores como podemos apreciar en la actualidad en las comisiones del Congreso, instituciones del Estado, Gobiernos locales y regionales.
Este panorama no vislumbra las reformas políticas que nos garanticen un cambio en las elecciones del 2026 demanda necesariamente un adelanto de elecciones para el 2024, aún sin estos importantes cambios, para aprovechar estos dos años con un nuevo presidente y nuevos congresistas, provenientes de nuevos partidos inscritos últimamente, que lleven a cabo las reformas necesarias y obtener mejores representantes para el 2026.
Con este nuevo Congreso 2024 se deberá legislar lo necesario para lograr una mayor participación de los jóvenes, constituir nuevos partidos políticos, con otro tipo de lideres que no perciban a estas agrupaciones como empresas donde ellos como dueños hagan lo que se les viene en gana para satisfacer sus intereses personales y continuar llevando al Congreso a gente que paga su participación en las campañas electorales.
Debemos aspirar partidos serios, con ideología, bien conformados y filtrados que permitan contar con gente proba y calificada como lo demanda un país tan rico, generoso y con un potencial tremendo en el escenario regional y mundial.
Finalmente, un mensaje a los conformistas que pretextando una “supuesta estabilidad” quieren mantener un statu quo post Castillo para continuar con sus negocios particulares, interactuar con los mismos actores políticos y decirles que serán responsables de la pérdida de dos años del quehacer nacional.