Jhordy Stainer Escobedo Mori, alférez de la Policía Nacional del Perú de tan solo 23 años, fue asesinado de al menos cuatro disparos en la madrugada del jueves en Carabayllo.
En el segundo día del estado de emergencia y en circunstancias aún desconocidas, un alférez de la Policía Nacional del Perú (PNP) identificado como Jhordy Stainer Escobedo Mori, de 23 años, fue baleado y asesinado cuando estaba junto a su pareja dentro de su vehículo, que estaba estacionado en una zona descampada en el distrito de Carabayllo.
Según primeras informaciones, dos sujetos a bordo de una motocicleta los encañonaron y obligaron a la mujer a retirarse para luego acribillar al joven. En el lugar se encontró cuatro casquillos de bala, además del chaleco, la placa y el arma de reglamento del policía, que fue encontrada sobre la pista, a la altura del copiloto.
La agresión se produjo cuando el policía se encontraba en el vehículo acompañado de su pareja, quien logró resultar ilesa. De acuerdo con el testimonio proporcionado por la joven a la policía, ella salió a pedir ayuda tras la irrupción de los atacantes, acción que evitó que fuera alcanzada por los disparos.
“No se trata de un robo ni de actos extorsivos, porque no ha estado recibiendo amenazas”, general Manuel Vidarte, jefe de la Región Policial de Lima.Asimismo, la enamorada señaló que fueron dos hombres que llegaron caminando y la obligaron descender del vehículo. Escobedo Mori cumplía dos años en servicio y actualmente laboraba en la comisaría de este distrito.
PNP descarta robo
Las autoridades hallaron el automóvil aún con el motor en marcha tras el ataque, y dentro de la unidad permanecían las pertenencias del alférez, entre ellas su placa, chaleco y teléfono móvil. Las autoridades han descartado preliminarmente que el móvil haya sido el robo, ya que no faltaban objetos de valor y el arma de reglamento del oficial fue encontrada en la vía pública, al costado del asiento del copiloto.
De acuerdo con el citado medio, la víctima fue trasladada al hospital de Puente Piedra, a donde solo se pudo certificar su deceso. La novia, pieza clave en el esclarecimiento del caso, permanece bajo resguardo y su estado de salud es estable.
El ataque ocurrió a tan solo metros del domicilio de la pareja de la víctima. Habitantes de la zona afirmaron reconocer frecuentemente el vehículo de Escobedo, ya que solía visitar a su novia todas las noches.