El Metropolitano sigue operando con buses que ya cumplieron su vida útil, provocando fallas, accidentes y molestia entre miles de usuarios.
El Metropolitano cumple 15 años de funcionamiento y su deterioro es evidente. Los buses que conforman el sistema ya superaron su vida útil de 12 años, pero siguen circulando pese a constantes fallas, accidentes e interrupciones del servicio. Los usuarios denuncian demoras, inseguridad y hacinamiento. Mientras tanto, la Autoridad de Transporte Urbano (ATU) asegura que planea renovar la flota, aunque aún no define fechas ni presupuesto.
Estado crítico del sistema
En los últimos meses, se han reportado múltiples incidentes en el Metropolitano. Buses detenidos en plena vía, interrupciones del servicio y accidentes de tránsito son ahora comunes. Estas fallas generan molestia y preocupación entre los pasajeros, quienes ya no confían en que las unidades lleguen a su destino sin fallas.
Edwin Derteano, representante de la organización Transitemos, advirtió que el Metropolitano se encuentra en una etapa agónica y sostuvo que el mal estado de las unidades pone en peligro a los usuarios y además agrava el tráfico en la ciudad, obligando a muchos a usar transporte informal o vehículos particulares.
Reclamos de los usuarios
La mayoría de usuarios coincide en que el servicio ha empeorado. Denuncian buses en mal estado, demoras constantes y falta de frecuencia. El hacinamiento y la lentitud han hecho que algunos opten por colectivos o mototaxis, a pesar de los riesgos que implican.
Promesas sin fecha definida
David Hernández, presidente de la ATU, declaró al diario que una de sus prioridades será negociar la renovación de las unidades y aumentar la flota operativa. El objetivo, según explicó, es devolver eficiencia y seguridad al sistema. Sin embargo, hasta ahora no se ha precisado cuándo se concretarán estas medidas ni con qué presupuesto se cuenta para ello.
Riesgo de colapso
Mientras no se renueve la flota, miles de limeños seguirán enfrentando un servicio que muestra signos claros de desgaste. Especialistas advierten que, si no se actúa pronto, el Metropolitano podría entrar en una crisis irreversible, afectando a más de un millón de usuarios diarios.