En otro lenguaje
Por: Jaime Asián Domínguez

El Perú hace rato que tiene partidos políticos que dan vergüenza, por decir lo menos. Y aquí entran a tallar los tradicionales, los relativamente nuevos y los que están en ciernes pero ya aprendieron las mañas. Solo los carcome un ideal: Sentarse en el poder, en sus distintas bifurcaciones (Ejecutivo, Legislativo y Judicial), y para conseguirlo inclusive se inscriben ante el complaciente Jurado Nacional de Elecciones robándole la firma y el consentimiento a miles de ciudadanos, como ha ocurrido por estos días.
Esto es un delito en cualquier parte del mundo y, como tal, debería tener una respuesta punitiva, o sea cárcel; sin embargo, todos sabemos que en nuestro querido país campea la impunidad y las leyes se adecúan a intereses creados, zurrándose en las necesidades nacionales o el bien común. ¿Ustedes creen que pasará algo con estos facinerosos que han afiliado indebidamente a personas para intentar engañar al JNE? Nada de nada y el proceso electoral proseguirá con estas manchas negras.
Por lo demás, esto de las firmas falsas es una costumbre vieja en nuestra comarca. Óscar Medelius, asesinado en febrero de este año por sicarios en Carabayllo, fue un notario que estuvo metido en el caso de las rúbricas truchas para la aparición del movimiento Perú 2000, con el que Alberto Fujimori tentó la presidencia por tercera vez. O sea, las camadas de ayer y las camadas de hoy de partidos políticos siempre han querido tomarle el pelo a los peruanos y ya es hora de darles una respuesta categórica mandándolos al diablo en las ánforas de votación.
Y, claro, este cargamontón de agrupaciones partidarias que tendremos en el partidor para el 2026 ha abierto las fauces porque sabe que el Estado es un botín y que anclado en el Congreso -ahora con más burocracia bicameral- puede hacer lo que le pegue en gana (además de recibir financiamiento público, que siempre va a parar al bolsillo de los caudillos). Lejanos los tiempos en que Acción Popular con Fernando Belaunde y sin ‘niños’, el PPC con Luis Bedoya y sin Lourdes y el mismo Apra de Haya de la Torre le daban peso a la política y al Congreso en el que hoy hasta mueven su curul chicas de OnlyFans. Terrible.
«Y, claro, este cargamontón de agrupaciones partidarias que tendremos en el partidor para el 2026 ha abierto las fauces porque sabe que el Estado es un botín y que anclado en el Congreso».