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Diego Vicuña Villar: En la «Universidad de la vida» creo que hice mi mejor «carrera».

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Diego Vicuña Villar, es uno de los más grandes decimistas del Perú. Antes de fallecer, le realicé la presente entrevista que permanecía inédita. Figura en mi libro Las mejores décimas peruanas. Perteneció al grupo Los Caballeros de la Décima conformado conjuntamente con Pedro Rivarola y Germán Sunico. Es Premio Palabra en Libertad de la Sociedad Literaria Amantes del País.

Por José Beltrán Peña.

JOSÉ BELTRÁN PEÑA: ¿Dónde nació?

DIEGO VICUÑA VILLAR: Nací en Canta, capital de la Provincia del mismo nombre – Departamento de Lima (Perú). Dueña de un historial muy importante, en sus territorios se dieron dos acciones militares triunfantes a favor de la Patria: «Quillapata» el 02 de mayo de 1821 (el mismo año de la Independencia) y «Sángrar» el 26 de junio de 1881.

J.B.P.: ¿Siguió estudios universitarios o fue un excelente alumno de la Universidad de la Vida?

D.V.V.: Las dos cosas. Los universitarios en la Decana de San Marcos, en las facultades de Letras y Derecho, carreras que no terminé debido a una rebeldía juvenil. En la Universidad de la vida creo que hice mi mejor «carrera»: bohemio, enamorado, viajero, dirigente sindical, dirigente político, dirigente deportivo, dirigente autoral, compositor y finalmente decimista.

J.B.P.: ¿Cuándo inició su carrera de escritor?

D.V.V.: Cuando ya había pasado los 60 añitos, y circunstancialmente, fue cuando conocí a mis ahora grandes amigos decimistas: César Huapaya, Germán Súnico, Pedro Rivarola, Antonio Cavero, con cuyo saber y conocimientos me deslumbré.

J.B.P.: ¿Cree que escribir es un trabajo o un lindo pasatiempo?

D.V.V.: Aunque parezca un pasatiempo, no lo es.

J.B.P.: ¿Podría definirme a la décima?

D.V.V.: Una definición breve sería: La décima es una estrofa de la poesía tradicional castellana, conformada por diez (10) versos octosílabos (ocho sílabas métricas) que en su variante de «Espinela» (la más recurrida) tiene métrica, tiene ritmo y tiene rimas muy puntuales y exigentes.

J.B.P.: Algunos críticos consideran que la décima es una subliteratura… ¿Cuál es su opinión?

D.V.V.: La Décima llegó a América con el Descubrimiento y la Conquista. Llegó aquí con otras estrofas: el soneto, el ovillejo, el romance, la copla, etc. Y en España la practicaron Lope de Vega, Góngora, Quevedo, Calderón de la Barca, Miguel de Cervantes Saavedra y otros grandes de esa época. El gran libro de Cervantes El ingenioso Hidalgo don Quijote de la Mancha, empieza prácticamente con décimas, en su prólogo y escritas por el mismo Cervantes. Calderón de la Barca tiene unas hermosas Décimas en su obra La Vida es sueño (Sueña el rico en su riqueza / que más cuidado le ofrece / sueña el pobre que padece / su miseria y su pobreza, etc). ¿Alguien podría decir que eso era subliteratura?
Aquí en Perú: Mariano Melgar, Gabriel Aguilar (los Precursores de la Independencia), Abelardo Gamarra «El Tunante», Martín Adán, José Santos Chocano, etc. tienen hermosas décimas.

J.B.P.: ¿Usted también ha compuesto canciones?

D.V.V.: Cuando estudiaba el tercer año de secundaria en 1953, hice un tercer puesto con una composición a la madre, y más tarde, ya en la década de los 70, compuse las canciones «Doscientas Millas Marinas» y «Machu Picchu», con música de Leopoldo «Polito» Bedoya y «Rosas para mamá», «Dime la verdad» y la Polca «Echa Muni» con letras y músicas mías, así como hice también el Himno del «Ministerio Público» y de algunos colegios particulares.

J.B.P.: ¿Está en contra de los que se autoproclaman decimistas porque no respetan la métrica de su escritura?

D.V.V.: No estoy de acuerdo con los que no respetan los cánones de la décima; y la décima que se practica en la actualidad, es asumida por todos los decimistas, que sí la respetan y es la Décima Espinela: octosilábica, rima consonante, cuatro sonidos, parada en el cuarto y octavo verso y solo así resulta una estrofa hermosa, musical que no por nada, ya resiste más de 500 años en el alma popular.

J.B.P.: ¿Hábleme sobre Los Caballeros de la Décima?

D.V.V.: Es un grupo de tres personas que promueve, creando y/o recitando décimas propias o a veces de otros autores. Actualmente lo integran: Germán Súnico Bazán, Diego Vicuña Villar y Roberto Arriola Badaracco. El grupo se inició hace diez años y era conformado por Súnico, Vicuña y Pedro Alberto Rivarola y Urdanivia. Al fallecer Rivarola, lo reemplaza Roberto Arriola.

J.B.P.: ¿Qué publicaciones tiene?

D.V.V.: Libros propios: Décimas PatrióticasDécimas Religiosas y SocialesDécimas a Personajes y Lugares PeruanosDécimas a CantaDécimas Criollas y en conjunción con Colegas: Décimas en afroLos Caballeros de la Décima, además de C.D.s y muchas publicaciones en «YouTube», «Google» y Facebook.

J.B.P.: ¿Políticamente cómo se define?

D.V.V.: Pertenezco al Partido Aprista Peruano donde he llegado a ser miembro del Comité Ejecutivo Nacional con Luis Alberto Sánchez , Armando Villanueva , Alfredo Tello Salavarría y otros grandes dirigentes. Nos llevamos bien y somos grandes amigos con mis «camaradas». Tengo muy buenos amigos en la izquierda y derecha peruana.

J.B.P.: ¿La décima es un estilo poético que puede servir para la protesta social?

D.V.V.: De hecho, no sólo en el Perú. Su forma ágil, musical y clara, aparte de la brevedad de sus estrofas sirve bastante.

J.B.P.: ¿Quiénes vienen a ser los mejores exponentes de la décima peruana?

D.V.V.: De los antiguos y ya fallecidos: Francisco del Castillo y Andraca, más conocido como «El ciego de la Merced» – Piura – 1716; Mariano Melgar – Arequipa – 1790; Pedro Genaro Delgado Mago – Lima – 1870; Carlos Vásquez Aparicio – Aucallama, Huaral – 1891; Marino Mendoza Yaya – Mala – 1902; Edelmira Lizarzaburu – Chiclayo – 1915; Nicomedes Santa Cruz – Lima – 1925, entre otros.

J.B.P.: ¿Qué le parece la educación en el Perú?

D.V.V.: Mala, en todos sus niveles. A vista y paciencia de nuestros gobernantes, han proliferado colegios, institutos y universidades que están haciendo millonarios a sus dueños y promotores, sin interesarle el resultado de sus enseñanzas. Pagan poco y mal a sus profesores. La educación estatal da pena, sobre todo en provincias.

J.B.P.: ¿Qué mensaje les daría a los jóvenes decimistas del país?

D.V.V.: Decirles que lean bastante estaría demás, porque ellos ya lo saben, pero sí que sean buenos observadores de la vida, del desenvolvimiento social con absoluto respeto y con mucha imparcialidad.