Pese al estado de emergencia, las detenciones por extorsión, homicidio y secuestro no superan el 1.4% en Lima y Callao, revelan cifras oficiales.
A 42 días de decretado el estado de emergencia en Lima Metropolitana y el Callao para combatir la delincuencia organizada, las cifras oficiales revelan que la mayoría de las detenciones no corresponde a delitos graves como extorsión, homicidio o secuestro. Según el Renadespple, en el primer trimestre del año solo el 1.38% de las 56,593 detenciones en el país fue por esos delitos, mientras que más del 98% corresponde a delitos menores. Exministros advierten que el fracaso en la lucha contra el crimen se debe a la falta de estrategia, inteligencia y recursos.
Cifras que desnudan el fracaso
El Gobierno extendió el estado de emergencia el 17 de abril, a través del Decreto Supremo 046-2025-PCM, argumentando la necesidad de enfrentar la creciente violencia. Sin embargo, las cifras del Registro Nacional de Detenidos y Sentenciados a Pena Privativa de Libertad Efectiva muestran otra realidad. Solo el 0.75% de las detenciones fueron por extorsión, el 0.46% por homicidios y apenas el 0.17% por secuestros, delitos que supuestamente justificaron la medida.
En contraste, los delitos más frecuentes en ese mismo período fueron la conducción en estado de ebriedad o drogadicción (27.02%), agresiones contra mujeres o integrantes del grupo familiar (18.85%), receptación (6.06%), lesiones culposas (5.60%) y hurto agravado (4.77%).
Transportistas en pie de lucha
La situación se agravó con la escalada de extorsiones, que golpearon especialmente al sector del transporte público. La violencia obligó a los transportistas a paralizar sus actividades semanas atrás, exigiendo a las autoridades medidas más eficaces frente a las mafias, responsables de la muerte de casi veinte conductores en los últimos meses.
Fallas estructurales
El exministro del Interior José Elice sostuvo que la lucha contra el crimen requiere un cambio urgente de estrategia. Propuso una «Inteligencia ampliada», usando a agentes no especializados en inteligencia para recolectar información clave. “Necesitamos una estrategia de ‘Inteligencia ampliada’, que utilice a los agentes que no son de inteligencia”, afirmó. Además, señaló que se debe dejar de buscar personas para enfocarse en buscar información sistemática y analizada, base sobre la cual diseñar acciones efectivas.
También advirtió que es indispensable sincerar la información. “Se debe hablar con evidencias”, remarcó.
Sin recursos ni personal suficiente
El también exministro del Interior Remigio Hernani fue más crítico. Dijo que la Policía “hace su máximo esfuerzo”, pero está rebasada debido a la falta de personal, tecnología y fondos. Subrayó que el fracaso en la lucha contra el crimen organizado es evidente. “El fracaso sigue todos los días. Cuando (Juan José) Santiváñez entró al Ministerio del Interior había cuatro muertos diarios, y cuando se fue censurado, dejó seis; ahora estamos llegando a siete. Eso dicen las estadísticas porque los muertos no se pueden ocultar”, declaró.
Hernani también coincidió en que se necesita reforzar la inteligencia, aunque reconoció que “hacer inteligencia operativa es cara”.