- Seudo encargado, que registra antecedentes, es sospechoso de abastecer de sustancia ilegal a delincuentes.
Fin a sus fechorías, las que podrían costar la vida. El grupo Olaya de la Municipalidad de Chorrillos intervino en flagrancia ‘el Búnker del Clonazepam’. En el que bajo la fachada de una licorería se ofrecían de manera ilícita el potente fármaco Clonazepam. Según las labores de seguimiento de los agentes municipales, malas personas frecuentaban el negocio para adquirir estos productos con fines ilícitos como el ‘pepear’ a inocentes en la zona sur de Lima. Se intervino al administrador del espacio; Darío Ureta Berríos ‘gordo Darío’, que cuenta con antecedentes.
Se trata de semanas de paciente seguimiento e inteligencia que tuvieron resultados la noche del miércoles, cuando el convoy del grupo ‘Olaya’ llegó a la cuadra 3 del jirón Arica, situado a pocos metros del malecón Grau de Chorrillos. “Por disposición del alcalde Fernando Velasco se trabaja a diario para erradicar estas malas prácticas que atentan contra las vidas de las personas. En esta oportunidad se intervino en flagrancia la venta de varias pastillas de Clonazepam con el agravante de la participación de una menor de edad. Todo quedó registrado por el personal”, explicó el coordinador del grupo Olaya; Elmer Robles.
En presencia de la subgerencia de Fiscalización Administrativa del municipio, también se corroboró que ‘el Búnker’ no contaba con los permisos para la venta de fármacos, además de contar con documentación irregular para su funcionamiento. “Se está negando a entregar los permisos. Dice que los tiene su hijo y que está en otro lado”, explicó la fiscalizadora sobre la actitud desafiante de Darío Ureta Berríos, también conocido en la zona como el ‘gordo Darío’ o ‘el tío pepa’.
Sin embargo el rostro le cambió a Ureta Berríos cuando se revisó el aparador de la tienda para encontrar dos cajas abastecidas con el potente fármaco Clonazepam. Esto quedó registrado en el acta de intervención del grupo Olaya, de Fiscalización Administrativa y de los policías de la comisaría de Chorrillos que llegaron para certificar lo ocurrido. “El agravante es el uso de una menor de edad para vender estás sustancias. No se descarta estar ante uno de los más solicitados abastecedores de droga y ansiolíticos en el distrito”, expresó un agente policial. Cabe precisar que Darío Ureta registra una intervención por venta de droga al menudeo en el 2010. Aquella vez, detectives del departamento de investigación criminal de Barranco – Chorrillos intervinieron su bodega para encontrar abundante cantidad de droga.
De parte de la Municipalidad de Chorrillos se dispuso la clausura del estacionamiento por lo antes mencionado. Asimismo se impuso el pago de dos UIT por el valor de 4,900 soles. “Se prevalecerá el principio de autoridad en el distrito. Es el encargo de nuestro alcalde. Este negocio no volverá a dedicarse a hechos ilícitos. En tanto el dueño quedó a disposición de la Policía Nacional”, recalcó el coordinador Robles.
