El tren se descarriló a la altura del Parque de la Muralla mientras se realizaban pruebas del convoy donado por Caltrain.
En su primer día de pruebas, uno de los vagones del tren promovido por Rafael López Aliaga se descarriló cerca del Parque de la Muralla, generando preocupación sobre la viabilidad del proyecto ferroviario Lima–Chosica. El hecho ocurrió en plena ceremonia de presentación, donde el alcalde defendía la llegada de los convoyes donados por la empresa Caltrain, mientras el Ejecutivo cuestionaba la legalidad y el sustento técnico de la obra.
El tren descarriló en su primer día de prueba
El lunes 14 de julio, alrededor de las 14:50 horas, el vagón número 4008 se salió de las vías durante un recorrido de prueba remolcado por las locomotoras 1033 y 1034. El incidente fue captado en video y difundido por redes y medios, lo que desató críticas sobre la falta de preparación para operar un sistema ferroviario de esta magnitud.
Según el informe técnico enviado al Ministerio de Transportes y Comunicaciones (MTC) por la empresa Ferrovías Central Andino, el tren transportaba cinco coches y una locomotora adicional desde el Callao hacia Lima, sumando un peso de casi 400 toneladas. Al llegar al punto kilómetro 14.500, el vagón se descarriló sin dejar daños personales ni materiales, aunque las maniobras para encarrilarlo tomaron casi tres horas.
Choque institucional y dudas sobre el proyecto
El evento se produce en medio de un fuerte enfrentamiento entre la Municipalidad Metropolitana de Lima y el MTC. El ministro César Sandoval acusó a López Aliaga de pretender imponer el proyecto sin cumplir las normas técnicas mínimas. Denunció además que los trenes no cuentan con infraestructura adecuada —como doble vía, estaciones y paraderos— y que los vagones donados por Caltrain son antiguos y requieren modernización.
En respuesta, López Aliaga insiste en que el proyecto es viable tanto técnica como financieramente. Asegura que el tren Lima–Chosica aliviará el caos vehicular y defiende su implementación inmediata, a pesar de las observaciones del Ejecutivo.
Críticas y escándalos paralelos
A la polémica se suman denuncias de presunto “despilfarro” por la realización de un show musical durante la presentación de los trenes, así como cuestionamientos de la Sunat por diferencias de más de S/800 millones en la valorización de los convoyes donados.
Por si fuera poco, medios revelaron que vecinos de Punta Negra recibieron tapers a cambio de asistir al evento. Mientras tanto, las causas del descarrilamiento siguen bajo investigación, y el futuro del tren Lima–Chosica permanece en suspenso, marcado por la improvisación, el conflicto institucional y el uso político del transporte público.