140 transportistas de la línea ETUPSA 73, ruta 1, paralizaron sus labores en protesta al ataque al conductor.
Un atentado contra un conductor de transporte público en el distrito limeño de San Juan de Miraflores ha generado una paralización de actividades por parte de sus compañeros, quienes exigen medidas inmediatas para frenar los casos de extorsión que afectan al sector.
El ataque ocurrió durante la madrugada del domingo 22 de diciembre, cuando el chofer, de aproximadamente 60 años, fue interceptado por dos desconocidos a bordo de una motocicleta mientras cumplía con su ruta habitual en la línea ETUPSA 73, ruta 1.
De acuerdo con las primeras investigaciones, los atacantes dispararon en cinco ocasiones contra el conductor, logrando que una de las balas lo hiriera superficialmente en el pecho. A pesar de la gravedad del incidente, el hombre fue trasladado rápidamente a un hospital cercano, donde se confirmó que su estado de salud es estable, según informaron sus compañeros a RPP Noticias. Posteriormente, acudió a la comisaría del sector para brindar su declaración sobre lo sucedido.
Extorsión detrás del ataque
El atentado estaría relacionado con una presunta red de extorsionadores que exige pagos a la empresa de transporte para no atentar contra la seguridad de sus trabajadores. Según declaraciones recogidas por RPP, los delincuentes habrían solicitado inicialmente un monto de 40 mil soles y un pago mensual adicional de 10 mil soles.
Un compañero del conductor atacado señaló que no se trata de un único grupo criminal, sino de varias organizaciones que estarían operando de manera simultánea contra la empresa. “Si no les pagan, van a comenzar a atacar a los choferes”, mencionó al medio.
Protesta y paralización de actividades
En respuesta al atentado, alrededor de 140 conductores de la línea ETUPSA 73 decidieron suspender sus operaciones como medida de protesta y en solidaridad con su compañero. Según informó RPP, los transportistas se congregaron en el último paradero de la ruta, ubicado en el distrito de Pachacamac, para exigir la intervención de las autoridades y denunciar la falta de seguridad en su labor diaria.
Uno de los conductores, quien lleva casi tres décadas trabajando en esta ruta, expresó su preocupación por el incremento de la violencia y la inacción de las autoridades. “Es la primera vez que veo algo así. El patrullero viene, firma y se va, pero eso no es una solución. Nos sentimos desprotegidos”, afirmó, al tiempo que hizo un llamado al Gobierno central para que tome medidas concretas contra las extorsiones.
El transportista también señaló que, según su percepción, los responsables de estos actos serían, en su mayoría, extranjeros que han llegado al país en los últimos años. “Le pido al Gobierno y a sus ministros que actúen, porque no están haciendo nada. Nunca habíamos vivido algo así”, agregó.
