Palabras del alma

Hoy quisiera compartir con ustedes un par de poemas de mi autoría, escritos en 2018. Los mismos, como la serie de textos que he venido escribiendo en esta columna, tratan de ofrecer la visión del verdadero Cristo, Aquel que nos trata con horizontalidad y ofrece Su Oído amigo para escucharnos. Un Cristo que se hace presente en la Política, a través de Sus agentes de cambio.

Justicia Divina – 10/05/2018

La cruz que carga no fue producto de Su arte como carpintero, sino el injusto veredicto de quien Lo rechaza por ser obrero. Sus proclamas perturbaron las comodidades de la realeza, cuya ausencia de Dios se propagó a la naturaleza.

Su valentía ocasionó que nos libremos de aquel mal, el cual, como filtro impuesto, desposeía al mar de su sal. Aunque llegó a ser condenado al martirio de tantos golpes, Su red fue más amplia y se convirtió en pescador de hombres.

Esperanzados en recibir a un mesías semejante a sus aposentos, algunos ignoraron al Dios hecho humano, por no estar atentos. Su gracia provino de esa pobreza ilusionada con alguien que ruja, la cual hace más fácil que un camello pase por el ojo de una aguja.

Cristo pobre, sabemos bien que sólo a través de Ti arribaremos a la Justicia. Bienaventurados seremos quienes tengamos sed de ella, y no de una ficticia. No está de más pedir que Te apiades de aquellos que todo lo venden, pues hemos de ser perdonados, como perdonamos a quienes nos ofenden.

Falsos apóstoles – 12/06/2018

Existe una farsa disfrazada de devoción, que desdibuja Tu legado como tradición.

Tú señalaste que lo dejen todo y Te sigan, pero se desviven por lo que otros digan.

Maquillados con artificiales movimientos, acuden a Tu casa sin desprendimientos.

Se ratifican en que así es su naturaleza, cegados por la vanidad de su bajeza.

No comprenden la esencia de Tu proceder, ilustrada en la expulsión de tanto mercader.

Se presentan como imprescindibles benefactores, siendo la personificación de cuevas de ladrones.

Confunden Tu misericordia con impunidad, mientras reinciden en su falta de amabilidad.

Ignoran que el Día del Juicio se acercará y la salvación sólo en Tus manos quedará.

Si crees en lo que aquí está escrito, pues no desistas de encontrar esa relación con Él, Quien también te llama para que seas un colaborador en Su Misión. Seamos la transformación que necesita nuestro país y el mundo. Gracias por leerme. Ahora nos toca a todos escribir el destino de nuestra historia.