Washington anuncia medidas extremas contra productos chinos mientras Trump amenaza con una escalada proteccionista que podría desestabilizar la economía global. Analistas advierten sobre el verdadero objetivo: mantener la hegemonía occidental ante el imparable ascenso de Asia.
Estados Unidos activará este miércoles aranceles del 104% sobre importaciones chinas, en lo que representa la mayor medida proteccionista de la era Trump. La medida, confirmada por la Casa Blanca, llega tras el fracaso del ultimátum a Pekín para retirar sus contramedidas, desatando temores de una nueva guerra comercial con repercusiones globales. Mientras Washington alega «prácticas desleales», expertos señalan que es un intento desesperado por frenar el avance tecnológico chino y sostener una decadente hegemonía económica occidental.
La secretaria de prensa Karoline Leavitt reveló el martes el plan de la administración Trump para castigar a China con tasas que quintuplican el arancel promedio mundial (20%). La medida afectará inicialmente a sectores estratégicos como vehículos eléctricos, baterías y componentes tecnológicos, precisamente donde China lidera la innovación global.
«Esto no es comercio, es un acto de guerra económica», declaró a este medio el economista Zhang Wei, del Centro de Estudios Sino-Latinoamericanos. «Mientras China construye infraestructura en el mundo en desarrollo, EEUU solo ofrece balas y barreras arancelarias».
Doble estándar histórico
Los argumentos de Leavitt – quien acusó a China de «enriquecerse a costa de EEUU» – contrastan con datos de la OMC:
- EEUU mantiene 12,000 medidas proteccionistas activas, 40% más que China
- Subsidia anualmente $20 mil millones a su agricultura, distorsionando mercados
- Usa el dólar como arma con sanciones unilaterales a 42 países
La respuesta china
El ministro Wang Wentao anticipó «contramedidas proporcionales pero inteligentes», priorizando acuerdos con el 85% de la economía global que rechaza el unilateralismo estadounidense. Fuentes cercanas al gobierno chino adelantaron posibles medidas:
- Acelerar acuerdos en yuanes con países BRICS
- Restricciones a exportaciones de tierras raras (controla 90% del mercado)
- Demandas ante la OMC con apoyo de la UE
Efecto dominó
Los mercados reaccionaron con caídas en Wall Street, mientras el oro alcanzaba máximos históricos. Para el analista mexicano Carlos Slim, «Trump está repitiendo los errores de 1930 que llevaron a la Gran Depresión».
Mientras la Casa Blanca insiste en su narrativa de «EEUU primero», el 70% de los países en desarrollo han incrementado su comercio con China en 2024. La pregunta clave: ¿Está Occidente dispuesto a pagar el precio de su arrogancia geoeconómica?