Demandamos vacunas y pensión para los trabajadores

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    De acuerdo a las denuncias periodísticas más recientes, continúa el ofrecimiento y reparto indiscriminado de vacunas desde el Ministerio de Salud, por lo que es comprensible el desinterés del Gobierno y algunos medios de comunicación por mostrar la lista completa de los implicados en el caso de corrupción Vacunagate.

    Así, la campaña “Pongo el hombro por el Perú”, con el presidente de la República como figura principal, brinda un mensaje contrario a los intereses de los peruanos. Solo en construcción civil existen más de 450,000 trabajadores que anhelan la suerte de Francisco Sagasti de poder elegir el día y la hora de su inoculación. El presidente debería entregar la lista del Vacunagate y otros que, como en su caso, han sido privilegiados con la vacuna sin ser personal en primera línea de combate contra el covid-19, mientras que cientos de peruanos mueren cada día por falta de camas UCI o, lo más lamentable, por falta de oxígeno.

    Mientras tanto, se niega a los empleadores la compra de vacunas para sus trabajadores. Es cierto que debe impedirse la venta privada de vacunas, pero debe permitirse la compra para la inoculación de los trabajadores, porque, al menos en construcción civil, donde existe negociación colectiva por rama de actividad y un nivel de diálogo aceptable entre empleadores y trabajadores, eso es viable.

    El obrero de construcción no puede hacer trabajo remoto; debe dirigirse a la obra a diario, arriesgándose a contraer covid-19 en el transporte público, porque este servicio no cumple con los protocolos mínimos de bioseguridad. Y al ritmo en que el Gobierno compra las vacunas y las inocula, pasarán años para que este beneficio llegue a todos los peruanos.

    Igual de preocupante por su lentitud es la reforma del sistema de pensiones, sobre la cual no hay un consenso que beneficie a todos los peruanos. La ONP no entrega pensiones a quienes no acumulen 20 años de aportes y las AFP entregan pensiones de hambre o abandonan a sus afiliados cuando se les acaba el fondo que han destinado para ellos.

    La Federación de Trabajadores en Construcción Civil del Perú (FTCCP) sostiene su postura por una reforma del sistema de pensiones con aportes del Estado, trabajadores y empleadores, como lo plantea el Convenio 102 de la OIT ratificado por el Estado peruano ¡hace 60 años! Ello con el fin de llegar al Bicentenario de la República con un sistema más justo y sin discriminaciones que garantice una pensión digna para todos los peruanos sin excepción.

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